Pero si tuviera que escoger mi
favorito sin duda sería correr. No soy bueno en los deportes de equipo, soy
competitivo pero solo en aquellos que todo el esfuerzo depende de uno mismo y
no tanto de un equipo, posiblemente por esta misma razón es que siendo correr
un deporte individual es que me agrada más que ningún otro. Pero qué tiene de
especial para mí el correr que lo hace mi favorito y que ahora puedo
considerarme un corredor.
Correr
es simple, no necesitas una gran infraestructura como un gimnasio donde tienes
que pagar por entrar, puedes hacerlo a cualquier hora del día y que yo
recomiendo sea por las mañanas y de preferencia antes de que salga el sol,
necesitas un par de tenis y ropa cómoda, hacer un calentamiento adecuado y
comenzar a correr, tal vez sin meta o sin rumbo, conforme te vaya gustando le
irás dando importancia al tiempo, a la velocidad, a la ruta, al piso y una gran
lista de variables que te irán ayudando a ser mejor corredor. Basta con que
abras la puerta de tu casa y ahí mismo puede comenzar tu ruta.
Correr
te desafía, es un deporte que al primero que pone a prueba es a ti mismo, desde
crearte un hábito, seguir un entrenamiento, una alimentación, hasta sentir en
plena carrera que no puedes correr ni 100 metros más, sin embargo, ese esfuerzo
es el que va forjando tu carácter de corredor y llegar a tu meta, pero sobre
todo darte cuenta de qué eres capaz.
Correr
es saludable, además de todos los beneficios del deporte puedo comprobar que
correr es el ejercicio en el cual quemas más calorías, ejercitas más tu corazón
y eliminas el estrés, el cansancio y todo aquello que te puede abrumar después
de un día pesado o comenzar un buen día o un fin de semana.
Correr
lo puedes hacer solo, pero cuando compartes con otra u otras personas el gusto
y la pasión por este deporte es aún más divertido, retador, y motivante.
Correr
es adentrarte a un mundo dónde puedes escuchar cada latido de tu corazón, cada
pisada en el asfalto, pasto, arcilla, o el terreno que escojas, sentir el
sudor, las manos frías del aire helado en invierno, o el calor de un verano, es
sentir los músculos de tus piernas trabajando a la perfección, y tu mente
dirigida a un objetivo “sentirte bien”.
Correr
puede cambiar tu estilo de vida, buscar el mejor horario para hacerlo,
sacrificar una desvelada por poder completar los kilómetros de la semana, terminar
la fiesta a horas decentes para que esa desvelada no afecte tu avance, hacer de
las tiendas de deportes tus favoritas, y conforme va aumentando tu interés,
buscar un sinfín de actividades que te lleven a ese círculo tan agradable que
es ser un corredor.
Correr
para mi, es liberar mi estrés, mis preocupaciones, poner mi mente a reposar,
activar mi cuerpo, competir contra mi cuerpo, eliminar lo que me hace daño,
lograr nuevos retos, sentir el aire limpio, escuchar como suena una calle a las
5:45 am; ver un amanecer haciendo ejercicio, escoger la música adecuada y
comenzar o terminar un día con la oportunidad de haber hecho mi deporte
favorito.
En este año ya competí, hice un
10K (10 kilómetros) el pasado 17 de junio de 2012, voy por mi segundo el
próximo 5 de agosto de 2012; y no busco por ahora tener un tiempo de competencia
o ganarle a alguien, sino demostrarme, demostrar a la gente que me rodea, que
me conoce, que me lee, que el correr no solo es ejercicio físico, no es solo un
deporte sino un estilo de vida.