Con un poco de añoranza y a la vez motivación, recuerdo aquellos años en los que hacía ejercicio 7 veces a la semana. Que el levantarme a las 5:30 a.m. para ir a hacer ejercicio, así lloviera, helara o el calor me ayudara a despertar era la mejor forma de comenzar un día pesado. Hoy por situaciones, que más bien son pretextos, hago máximo 3 horas a la semana, ¡pffff! que horror.
Si bien no he subido (tanto) de peso, mi cuerpo ya no es el mismo y sobre todo el manejo del estrés tampoco.
Por todo esto entonces me he comprometido conmigo mismo a realizar 90 días de preparación física, 90 días de alimentación saludable, 90 días para retomar mi estilo de vida... el deporte.
Cada semana haremos un recuento y un balance... hasta entonces.
1 comentario:
5:30 am?!!??!
Eres el segundo hombre que conozco que hace eso!!!
El primero, tiene 32 años, tiene 5-6 años de casado, y así llueve, truene o relampaguee, sale a correr cuando ni las gallinas se han levantado. :/
Sí se puede!
Sí se puede!
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