Estamos a días de celebrar el doscientos aniversario del inicio de la independencia en México, y la única reflexión que viene a mi mente, además de planear cómo pasar 4 días de asueto, es si realmente los mexicanos somos independientes.
Según el diccionario < http://buscon.rae.es/draeI/ >, independencia significa 1) cualidad o condición independiente, 2) libertad, especialmente la de un estado que no es tributario ni depende de otro, y 3) entereza, firmeza de carácter., me identifico con las últimas dos, y en base a eso puedo decir que en la teoría somos una nación independiente.
Hay que celebrar nuestra independencia, en 200 años hemos evolucionado y crecido, hemos superado situaciones políticas, económicas y sociales, hemos sido el ejemplo de otras naciones y hoy nos reconocen como un gran país.
Sin embargo, a mi opinión no hay nada que festejar, por la simple razón de que hoy seguimos bajo el yugo de un colonizador, bajo el mando de un estado realmente fallido, y bajo la influencia de empresas o personas que aprovechan nuestra condición de pobreza y poca educación, independizarnos de cada uno de esos actores es realmente complicado.
Hoy no habrá un cura que se levante para organizar un país y con un toque de guerra nos independicemos de nuestro país vecino, no habrá un capitán del ejercito que se atreva a levantar al pueblo en armas contra el gobierno, o más aún, no hay un idealista con verdadera autoridad para convertir a México en una nación libre de los medios de comunicación que informan lo que quieren y desinforman lo que no, de un grupo selecto de políticos y millonarios que gozan de beneficios para no repartir la riqueza e igualdad de derechos en un país pobre e ignorante.
Soy partidario de la paz, buscador de la razón, y por eso no creo en la violencia, sino en la transformación de cada uno de nosotros. En festejar a México con una actitud que haga se empiecen a mover los hilos que sostienen nuestra libertad, y que con tus acciones en lo individual hagamos una cadena que haga temblar aquellos colonizadores, gobernantes y entes políticos y económicos.
Necesitamos unión, necesitamos disposición para convivir, requerimos un pueblo educado, nos urge un proceso de reconciliación que nos haga amar el suelo en el que vivimos, que dejemos de quejarnos de las autoridades cuando nosotros ni hacemos bien lo que nos toca realizar, que hoy trabajemos por México desde tu espacio laboral, desde tu casa, desde la calle, no quieras un gran país cuando tu no eres una gran persona, no pidas políticos honestos cuando tu ni con tu persona lo eres, no quieras medios de comunicación sinceros cuando tu bandera es la hipocresía e incongruencia, no esperes ser rico para hacer algo por tu prójimo, hay que ser productivos, proactivos y realmente razonables en lo que exigimos pero a la vez hacemos.
No es un mensaje motivacional, es la realidad, piensa en lo que haces y a cuantas personas beneficias o perjudicas. Estás enterado que hoy, estados enteros están devastados por la fuerza de la naturaleza, ¿ya hiciste algo por ayudar?, por cooperar y auxiliar a personas que como tu se levantan a diario para llevar un sustento a casa y que por las lluvias lo perdieron todo y que son tan mexicanos como tu o como yo.
No se trata de juzgar y mucho menos de reclamar, es cuestión de actuar y ser cada día en cada acción un mejor mexicano para lograr esa gran nación que todos anhelamos.
Mi sugerencia ya la escribí http://rogoze.blogspot.com/2010/04/educacion-y-deporte.html, con educación y con deporte seremos esa nación que no necesitemos 200 años para festejar en grande una libertad, sino que día a día la podamos tener.
Es simple, con educación un pueblo crece, con el deporte una nación como la nuestra se une.
¡Viva México!